Operado del Síndrome Compartimental

Ya lo dice el propio título... por fin estoy operado del Síndrome Compartimental, esa enfermedad fisiológica que padecía la cual me ha arruinado las tres primeras carreras del FIM CEV Repsol. Era una enfermedad que siempre tuve, pero que sólo se presentaba practicando motocross, hasta que también lo hizo al saltar a Moto2 debido al enorme esfuerzo físico que estas motos conllevan.

Esta enfermedad de los antebrazos consiste en que el músculo, al ejercitarse, crece más que la fascia que lo recubre, generando una enorme presión sobre este y provocándole una especie de infarto, el cual yo notaba a modo de mucha perdida de fuerza y algo de sensibilidad.

Debo agradecer el enorme trabajo realizado por el Dr.Barrera, el mismo artista que también me arregló el dedo y operó del Túnel Carpiano.

Soy consciente de que llegaré a Valencia con puntos y con dolor, pero eso no me echará atrás!

"Nos vamos de Montmeló con mis primeros puntos en Moto2"

Este fin de semana tocaba correr en casa. Bajo un sol abrasador hemos disputado no una, si no dos carreras. Así que con esta doble prueba nos jugábamos mucho en un solo día. Algo, que si ya es importante cuando corres en tus mejores condiciones, no digamos si no estás al nivel físico que te gustaría. Y es que, mis ganas por estar en "la pomada" entran en conflicto con el dolor que tengo en el antebrazo cuando llego a la quinta o sexta vuelta.

Ya desde los entrenamientos del viernes trabajamos en una puesta a punto que aunque no era la más rápida, me permitiera pilotar más vueltas sin fatigar mis antebrazos. El sábado, tras los entrenamientos cronometrados quedé en 14ª posición para la parrilla de salida.

Durante todo el fin de semana estuve pensando cuál sería la mejor manera para afrontar las dos carreras que me esperaban el domingo. Y es que al intensísimo calor que hacía tenía que buscar una estrategia para soportar el dolor del antebrazo y acabar la carrera lo mejor posible.

 El domingo y cuando completé la 5ª vuelta de la carrera de la mañana, comencé a notar las primeras molestias en el brazo, así que decidí luchar por mantener la plaza. Finalmente, conseguí entrar en la zona de puntos (15ª posición), lo cual, no está mal, pero tengo muchas ganas de luchar por los primeros puestos de carrera.

En la segunda carrera quise probar otra estrategia: ir a tope desde el principio para intentar adelantar a más rivales que en la carrera de la mañana. ¿Resultado? Pues, bastante peor, ya que, aunque el dolor empezó más tarde, lo hizo con más fuerza. De hecho, mis vueltas más lentas fueron en esta carrera.

Al final, nos vamos de Montmeló con dos puntos y una decisión: poner solución al problema del síndrome compartimental. Espero poder operarme lo antes posible, acabar con esta limitación y poder luchar cada vuelta con la misma intensidad.

La próxima carrera es el 9 de julio en el Circuit de la Comunitat Valenciana Ricardo Tormo. Ya tengo ganas de correr allí, eso sí, me gustaría hacerlo a tope!